Ref: AR-J-500
Elegante Copón en Plata Dorada, fabricado a finales del siglo XIX. Preciosa y delicada pieza religiosa de formas ondulantes y bella decoración vegetal a base de hojas cinceladas con sencillo perlado interior y flanqueadas en las intersecciones por un original punteado que imita diminutas florecillas. Presenta un ancho base circular silueteado con decoración de bellas hojas distribuidas en perfecta geometría. El pie tiene en su parte central un grueso nudo decorada con hojas enmarcadas en formas romboidales en clara armonía con la base y la copa. La copa en plata maciza se distribuye en dos partes separadas por un delicado perlado doble que recorre todo el contorno. La tapa presenta la misma decoración que la base, con hojas alternadas en clara armonía jugando con la alternancia de rugosidad y brillo del metal. El remate de la pieza, en forma de cruz latina, es de bella factura, y entronca de manera clara con el simbolismo religioso de este tipo de piezas. La cruz, de puntas cuadrangulares, aparece decorada en su centro por una delicada flor que denota una mayor decoración a esta fantástica pieza. El pie es de metal dorado y la copa es de plata maciza- La pieza aparece contrastada donde cierra la tapa, con las marcas de plata maciza de primera Ley con el sello francés (Minerva), lo que atestigua su origen y su originalidad, con todos sus contrastes genuinos y en muy buen estado de conservación y estético, lo que sin duda la convierte en una pieza realmente magnífica.
Decorativa pieza perfecta para una estancia acorde con su calidad.
Medidas: 22 cm (altura) y 9,5 cm (diámetro de la base).
Las piezas macizas como la copa este ejemplo se llevan a cabo mediante fundición, y son de una mayor calidad, ya que se trata de un método caro de fabricación. El origen de la plata religiosa se remonta a los años en los que, gracias a Constantino el Grande, el Cristianismo se convirtió en la religión oficial del estado. A partir de ese momento este tipo de objetos se convertiría en uno de los principales ingresos de los artesanos de la plata. Este tipo de piezas religiosas, al igual que el resto artes decorativas, van acorde en sus decoraciones con el estilo del momento. Presentan las más variadas formas, primando casi siempre las formas vegetales y florales, pero añadiendo siempre la cruz, bien sea en su remate o en alguna parte de la copa o pie, dejando claramente marcado es uso litúrgico que se le daba a este tipo de piezas.
