Microscopio antiguo E. Leitz Wetlzar. Alemania en 1918

Impresionante microscopio antiguo E. Leitz Wetlzar fabricado en Alemania en 1918. Se trata de un maravilloso instrumento de investigación científica profesional, que ha llegado a nosotros en excelente estado de conservación. El microscopio incluye pletina con ajuste micrométrico, diseñado para poder mover las muestras sin tocarlas con los dedos y con toda la precisión requerida para su observación. Incorpora también revólver de tres lentes, todas ellas originales de la marca y en óptimas condiciones. Tanto el microscopio como los accesorios que lo acompañan (1 objetivo extra, además de los que porta el revólver, y 4 oculares) se presentan guardados en un precioso estuche de madera de caoba maciza, original de época.

El microscopio lleva el número de serie 178196 grabado en la torre. Este número aparece también grabado en el canto superior de la puerta del estuche, y manuscrito a tinta en la ficha de cartulina con los datos del instrumento. La torre y el resto de los componentes de latón están en magníficas condiciones, y conservan el barniz protector original que aporta al metal una pátina muy atractiva. El pie de hierro con forma de herradura (horseshoe foot) lleva un bello acabado esmaltado en negro, liso y brillante. Todos los tornillos y engranajes del microscopio funcionan de manera suave y fluida, haciendo de su manejo un auténtico placer. Por su parte, el estuche de caoba está también en óptimas condiciones: conserva el acabado barnizado a muñequilla original, así como la cerradura y la llave en perfecto estado de funcionamiento.

Su gran calidad, el prestigio de la marca y el atractivo diseño de principios de siglo hacen de este antiguo microscopio Leitz Wetlzar una pieza digna del mejor museo de ciencias y tecnología.

Historia de Ernst Leitz Wetlzar

Los inicios de la célebre firma de material óptico Enrst Leitz Wetzlar se encuentran en la primera mitad del siglo XIX, cuando Carl Kellner, mecánico y matemático autodidacta, fundó el Carl Kellner Optisches Institut en la localidad alemana de Wetzlar. Tras su temprana muerte, su viuda continuó con el negocio. En 1864, el ingeniero mecánico Ernst Leitz entró en la empresa; tras solo cinco años se hizo con el control y cambió su nombre por el de Ernst Leitz Wetlzar. Leitz llevó la empresa al éxito tras introducir mejoras como la producción en serie, que logró un gran incremento del volumen de ventas a partir de 1871. Los microscopios de Leitz incluían mejoras técnicas que aumentaban su calidad, lo que hizo que para finales del siglo XIX la empresa tuviera ya un sólido prestigio a nivel mundial. Ernst Leitz murió en 1920, y la empresa pasó a manos de su hijo. Además de por la fabricación de microscopios y material óptico, la firma Leitz aumentó considerablemente su fama gracias a la producción de las célebres cámaras fotográficas Leica (abreviatura de Leitz Camera).