Máquina de Escribir Continental Standard en Perfecto Funcionamiento. Alemania, 1937

Esta imponente máquina de escribir es una Continental Standard, un modelo muy popular que se comercializó durante los años 20 y 30 del siglo XX. La máquina presenta cuerpo de hierro esmaltado en negro y funciona mediante sistema de golpeo frontal. Está bien conservada y funciona de maravilla, tal y como cuando fue fabricada. Todas sus partes y componentes son originales de la época, formando parte de una máquina de escribir llena de encanto, atractivo estético e historia. El teclado está formado por piezas redondas, de color negro y símbolos en blanco a excepción de una tecla roja. Las teclas están rodeadas por el clásico anillo niquelado que las embellece y refuerza.

La marca Continental corresponde a un diseño de máquina de escribir creado y comercializado por la compañía alemana Wanderer Fahrradwerke. Esta empresa comenzó su trayectoria fabricando motocicletas y fresadoras, allá por el año 1894. En 1904 presentó su primera máquina de escribir, la Continental Standard, que se mantuvo en producción con tan solo ligeros cambios durante varias décadas. La parte delantera de estas máquinas se puede abrir para facilitar su limpieza. La Continental fue la máquina de escribir más popular de Alemania durante la primera mitad del siglo XX, en cualquier de sus tres modelos: Standard, Silenta y Klein Continental.

El modelo que nos ocupa es tan sólido y fiable como el resto de las máquinas de escribir fabricadas por la firma. En la parte delantera, en el frontal vertical aparece el nombre de la máquina, CONTINENTAL, impreso sobre una W correspondiente a la inicial del nombre de la empresa que la fabricó. La palabra CONTINENTAL también aparece sobre el portapapeles, encima del carro, con la misma grafía: mayúsculas amarillas con una fina línea verde en su interior. La máquina se encuentra muy bien conservada, mostrando solo algunos signos de desgaste en la barra de hierro frontal, bajo el teclado.

Esta magnífica máquina Continental Standard encontrará su lugar en el despacho o salón más elegante.