Ref: MC-A-162
Atractiva calculadora antigua de la marca Addo, fabricada en Suecia en el año 1920. Esta máquina de calcular se encuentra en buen estado de funcionamiento y puede hacer las operaciones matemáticas igual que el primer día. La calculadora incluye una impresora que también funciona a la perfección. En lugar de aparecer en la ventana característica, en este caso los resultados aparecen impresos sobre el papel del rollo situado en la parte superior.
Estas máquinas se han empleado desde hace décadas y siempre han constituido una buena forma de tener un recuento de las operaciones matemáticas de los negocios, para llevar la contabilidad.
La calculadora se encuentra en buen estado, aunque su lacado negro está algo manchado y le falta una de las teclas (el botón con la función de “reset”), pero conserva la palanca y puede accionarse sin problemas. También es posible limpiar el metal para que la máquina recupere en parte su aspecto original, aunque desde luego el tiempo ha dejado su impronta en ella, convirtiéndola en un objeto lleno de encanto antiguo. Sin embargo, sigue siendo una pieza altamente decorativa que además se puede utilizar sin problemas para realizar operaciones aritméticas e imprimir sus resultados.
En la parte frontal superior de la máquina, justo ante el rollo de papel, podemos ver una placa de metal dorado con la inscripción BURMA, STÉ DE MACHINES DE BUREAUX. Bajo estas palabras, que sin duda constituyen el nombre del establecimiento donde se adquirió la calculadora en origen, aparecen también la dirección y el teléfono, que indican que la tienda estaba ubicada en Bruselas (Bélgica).
Encima de la placa podemos ver unas letras en relieve que forman la inscripción AKTIEBOLAGET ADDO. Además, en uno de los laterales podemos ver la inscripción M111 impresa en grandes letras y números blancos. La marca Addo fue fundada en Malmö, Suecia, en el año 1918 por Hugo Agrell. Su hijo se llevó la empresa a los Estados Unidos en el año 1950. Esta firma fue conocida sobre todo por sus calculadoras mecánicas, aunque a lo largo del siglo XX también llegaron a producir muchos modelos electrónicos, algunos de los cuales fueron fabricados por la marca Sharp en Japón.
Esta magnífica calculadora es digna de pertenecer a un museo de aparatos mecánicos antiguos, y sin duda será todo un hallazgo para un buen coleccionista de máquinas vintage.
Medidas: Ancho: 350 mm. Alto: 200 mm.
