Ref: AR-A-109
Bello conjunto de cáliz y patena de plata maciza parcialmente dorada, realizado en Francia en el año 1900. Ambas piezas se presentan en su estuche original, gracias a cuya protección han llegado a nosotros en excelente estado de conservación. El cáliz y la patena son de plata deprimera ley y llevan contrastes que atestiguan su origen, tanto en la copa como en el pie. El cáliz es de bella factura, mostrando una decoración sencilla y elegante con motivos vegetales y cruces griegas.
La copa está dorada por el interior y el exterior.
La copa se asienta sobre una base que parte del tallo o fuste del cáliz; esta base está formada por unas hojas sencillas y estilizadas, que hacen una función similar al cáliz de una flor, soportando la copa como si de la corola se tratase. Bajo la copa aparece el nudo, con una decoración floral y simétrica bellamente realizada. Bajo este nudo de mayor tamaño hay otro más pequeño del que parte la amplia base del cáliz; este nudo secundario está decorado con hojas similares a las de la copa. Finalmente, la base lobulada lleva una bella decoración vegetal grabada y el relieve.
La patena muestra como decoración una gran cruz griega rodeada por una fina cenefa circular.
Tanto el cáliz como la patena muestran varios contrastes que nos hablan del origen y la calidad de la plata con la que están realizados. Los dos artículos se presentan en su estuche original, una caja forrada en material imitación piel granate por su exterior y en fieltro rojo por su interior. El estuche está ligeramente deteriorado pero ha cumplido eficazmente su función, ya que el cáliz y la patena han llegado hasta nuestros días en magnífico estado de conservación.
Este conjunto de cáliz y patena es una auténtica maravilla, estando destinado a formar parte de la mejor colección de arte sacro que se precie o bien para volverlos a consagrar y rescatarlo devolviéndolo a la Iglesia.
Medidas cáliz: Ancho: 135 mm. Alto: 235 mm.